- Cada vez más personas le confían a la IA sus problemas emocionales.
- De casos de extrema a gravedad a cuestiones menores: ¿Es peligrosa la ilusión de que hablamos con un ser humano?
«No me agrede, no me cuestiona, no me juzga»: los riesgos de contarle los problemas a ChatGPT, una tendencia que crece
Comparte este artículo
No hay comentarios
No hay comentarios